El día 12 de octubre se celebra en nuestro país el Día de la Hispanidad y no es sólo el día de la Fiesta Nacional, la exaltación de lo que es España y sus emblemas, sino también el día en que muy diversos pueblos, separados por un océano Atlántico inmenso, a caballo entre América y Europa, se sienten hermanados.
Perdonad que se me antoje bonito el que diferentes pueblos se unan bajo un mismo sentimiento, acostumbrados como estamos a un mundo en conflicto.
Más allá de políticas, de desencuentros... existe un horizonte común que en el lenguaje de la música se hace increíblemente visible. Rasgos de Tomás Luis de Victoria, de Cristóbal de Morales, de Guerrero se adivinan en las primeras músicas de las catedrales de Cuzco, Andahuylillas o Puebla. Un común lenguaje pianístico se adivina en Lecuona, Albéniz o Falla. La guitarra se hace universal de la mano de Andrés Segovia y nos resuena profundamente hispana en Agustín Barrios, Leo Brower, Heitor Villa-Lobos...
Por eso en Música hemos tratado de abordar estos días este "universo musical común", propio, que nos hermana a todos. Hemos recorrido en las aulas las músicas y personalidades de los cubanos Ernesto Lecuona y Leo Brower, del paraguayo Agustín Barrios, del argentino Astor Piazzola, del peruano Daniel Alomía Robles, del mexicano Gutiérrez de Padilla, de la primera compositora de Brasil, Chiquinha Gonzaga... "sonadores" todos de esta Hispanoamérica, de esta Iberoamérica hermosa que feliz se expresa a través de guitarras, bandoneones, charangos, zampoñas, violines y quenas.
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